“DE LAS CUOTAS A LA PARIDAD. LOS RETOS PENDIENTES”
Dra. Georgina Cárdenas Acosta
Conferencia impartida el 30 de agosto de 2018. (Resumen)
A principios del siglo XX las mexicanas carecían de derechos políticos, no eran consideradas ciudadanas, fue hasta 1947 que obtuvieron el derecho a sufragar a nivel municipal y en 1953 se otorgó el sufragio universal; sin embargo, ese derecho formal no se traducía en igualdad sustantiva, es decir, las mujeres podían sufragar; pero muy pocas lograban ser electas, lo que tenía una explicación basada en el género y en una cultura que coloca simbólicamente a las mujeres en el ámbito público.
Fue a través de presiones y acuerdos promovidos por diferentes grupos feministas y conferencias internacionales que se estableció implementar una serie de acciones de discriminación positiva (cuotas) para que las mujeres tuvieran posibilidad real de acceder a espacios de toma de decisiones. En el caso de México se transitó de las cuotas que se incorporaron en la legislación electoral en 1993 a la paridad de género que quedó plasmada en la constitución y en diferentes leyes federales, y que subsecuentemente se armonizaron en el territorio nacional.
El principio de la paridad ha resultado muy efectivo para los cargos legislativos tal y como se ha observado en las elecciones de 2018; sin embargo las mujeres aun están accediendo en menor medida en los ejecutivos: gubernaturas y presidencias municipales; lo que habla de la importancia de seguir analizando desde una perspectiva de género los obstáculos que enfrentan las mujeres para acceder a estos niveles de gobierno y trazar una ruta en conjunto con los diferentes partidos políticos para la igualdad sustantiva.
El compromiso real de los diferentes partidos políticos con la igualdad sustantiva posibilitará que los ejecutivos dejen de ser el techo de cristal de las mujeres; sin duda las capacitaciones a la militancia y a las y los candidatos debe ser ineludible y sistemática.
